NO HAY ÉXITO SIN VISIÓN

18 abril 2009 en 17:54
Tener visión es algo que pocos pueden regocijarse por poseer, tener visión implica en cierto sentido una inteligencia con perspectivas más amplias, una inteligencia con un alcance mucho mayor en cuanto a la dimensión del tiempo, y para quienes tienen visión es mucho más fácil maximizar oportunidades y minimizar riesgos en el futuro cercano y en el largo plazo, por lo tanto el logro de objetivos y metas tiende a llegar –con ayuda también de ciertas circunstancias- de manera mucho más rápida.

Actualmente hay personas y empresas que dicen tener visión, incluso a veces llegamos a pensar que empresas importantes transnacionales, presidentes, directivos y gobiernos deben tener visión, pero no es raro darse cuenta de que el pensamiento de corto plazo es lamentablemente lo que más abunda.
Lamentablemente tanto individuos como empresas y organizaciones a veces sacrifican su futuro – sin saberlo – en afán de conseguir bienes o logros presentes, en el corto plazo.

¿Por qué a veces se cree como cierto el hecho de que si te encuentras bien hoy, te encontrarás bien mañana?, ¿Por qué no cuestionamos los paradigmas en los que nos encontramos de pie?, ¿Por qué le creemos a quienes dices que las cosas deben ser así?, Podemos encontrar nuevas formas más eficientes para hacerlo todo, mejores formas de convivencia social, mejores formas de desarrollo evolutivo, mejores formas de cultura y progreso empresarial.

Es hora de nuevas revoluciones científicas, culturales y políticas!!!

Tuvimos que esperar a que la crisis de 2008 nos pegara en las narices y en nuestros bolsillos, para preguntarnos: ¿Habrá nuevas formas de organización económico-política que sean incluyentes y sustentables, que generen bienestar para la mayoría?

Nuestra mente se encuentra en condiciones de esclavitud ideológica cuando aceptamos la aseveración que dice: Mientras funcione no hay por qué cambiarlo.

Tener visión se trata de ver con inteligencia las cosas y todo lo que te rodea, tener visión es mirar desde varias perspectivas y puntos de vista al mismo tiempo, tener visión es comprender la figura completa.

Imagina que tienes 1 cm de estatura, y te encuentras parado sobre uno de los vértices de un dodecaedro de más de 150 metros de altura, ¿Qué es lo que verías? … Quien no tiene visión, pasaría el resto de su vida observando solo el vértice y un par de aristas, tener visión sin embargo es poder alejarse mentalmente lo suficiente para poder apreciar la figura completa, el dodecaedro entero y comprenderlo.

Desde mi punto de vista (por supuesto que sin ánimo de crítica) aquellos que poseen visión se encuentran en ventaja sobre los que no la tienen.

Una empresa que posee directivos y personal visionario, estará seguramente dentro del 5% del mundo corporativo que subsistirá con éxito cualquier adversidad tomando la bandera de la resiliencia y el progreso, aquella que sin importar las crisis de cualquier tipo tendrá el orgullo de poder tomar las circunstancias por los cuernos y tener el control por el mango. Así mismo aplica para el individuo.

Actualmente esta virtud o cualidad, tener visión, ya no es un plus, ni para las empresas ni para los individuos, ahora ya es una necesidad para sobrevivir en un entorno cada vez más competitivo que excluye quienes se atrasan en esta evolución de conocimiento y de la producción.

Un empresario SIN VISIÓN: Siempre hará las cosas como las aprendió, o como le dijeron que se hacían, adoptó y compró las ideas de otros y las hizo suyas, fuera de ello no tiene muchas cosas que enseñarle a sus subordinados, incluso probablemente no tenga tampoco liderazgo, no le importa tener personal mediocre en la empresa, quizás ni se dé cuenta de ello, incluso quizás tenga directivos mediocres, prefiere que sus empleados le caigan bien por encima de su aportación de valor a la empresa, por definición, tendrá la responsabilidad de que: 1. En el mejor de los casos, en un escenario positivo, la empresa no crezca al ritmo que podría crecer. Y 2. En el escenario realista, que la empresa pierda valor, respeto y dinero. Todo esto en el mediano y largo plazo.

Pero en entornos sociales se desenvolverá con suprema audacia, tiende a discriminar y su visión es tan limitada que se rodea de directivos e individuos similares.



Un empresario CON VISIÓN: Tiene la capacidad para observar que la empresa está hecha de personas e individuos vivos, por ello tiende a elegir solo al personal con mayor capacidad y habilidades (inteligencia racional y emocional en equilibrio), detesta la mediocridad, por ello busca rodearse de gente capaz e inteligente pues también posee la humildad como para saber que puede aprender de otros. Busca el crecimiento y desarrollo en el largo plazo por encima del corto plazo, tiene metas y objetivos muy altos, sabe qué quiere y cómo lograrlo. Usualmente este tipo de empresario proyecta dinamismo e infunde en sus subordinados lealtad y respeto pues es un líder nato, su pasión por lo que hace contagia a otros directivos y empleados. Aprecia la diversidad en su empresa y admira la capacidad y el crecimiento personal respetando a los demás, sin discriminar ni prejuzgar, tendrá la responsabilidad de: 1. El crecimiento y desarrollo de la empresa con fundamentos sólidos como lealtad y capital de marcas, la fidelidad de sus clientes, publicidad con los hechos y resultados. 2. El crecimiento y desarrollo de sus colaboradores, socios y empleados, generando un crecimiento conjunto, todos hacia un mismo objetivo. 3. Demostrar que no es imposible ser inteligente en el siglo XXI.

Lamentablemente es más fácil encontrar un trilobite en la ducha un día de invierno que empresarios con visión, incluso es más fácil encontrar individuos con visión. Desde luego hay empresas que cuando observamos sus resultados y las actividades que llevan a cabo, sabemos que quien las preside y sus empleados generalmente tienen capacidad y visión. Unilever, Nissan, Toyota, Sony, Dell, Apple, Amazon, entre algunas otras. No así podemos decir lo mismo de aquellas que discriminan a sus candidatos, a sus socios, a sus proveedores, aquellos que piensan que hacer recursos humanos es: si me cayó bien, si hubo click, si hubo química que se quede en la empresa.
Lo único bueno de esto es que esas empresas tenderán a dejar su lugar, su market share, y sus clientes a aquellas empresas que si tienen visión y por lo tanto sucederá algo así como una evolución por medio de selección natural, las débiles morirán, las más fuertes sobrevivirán y tendrán futuro.

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